Los condilomas o verrugas venéreas son lesiones
pigmentadas (oscuras) en forma de coliflor que aparecen en la vulva y en las
áreas circundantes como el periné, y la zona perianal, pudiendo observarse
también en la mucosa vaginal, anal e inclusive crecer por dentro de la vejiga y
ser vistas saliendo por el meato urinario.
Estas lesiones son causadas por el Virus del Papiloma
Humano, generalmente los del tipo 6 y 11, los cuales son identificados como
benignos o de bajo riesgo.
El virus del Papiloma Humano (VPH) es transmitido sexualmente
y su prevalencia en la población general es alta, pero en las niñas se asume
que podría existir la posibilidad de una Transmisión Vertical, es decir ser
adquirida de su propia madre en el momento del embarazo o durante el nacimiento.
También se menciona la posibilidad de ser transmitida por madres o cuidadores
en los primeros años durante las actividades destinadas a la higiene genital o
cambios de pañal, puesto que dichos tipos de virus también suelen causar
verrugas vulgares en los dedos y en las manos. Sin embargo, no se debe soslayar
la presencia de estas verrugas y dejar de pensar en la posibilidad de abuso
sexual ya que se sabe que la modalidad de contacto manual-genital es una variante
frecuente en los casos de tocamientos de un abusador contra su víctima.
Mención aparte debe tener el llamado Condiloma Gigante
o Tumor de Butshcke Löwenstein que es el mismo condiloma que ha alcanzado
grandes dimensiones constituyéndose en una masa compacta que exige una intervención
quirúrgica especializada, generalmente asociado a condiciones de inmunodeficiencia
primaria o secundaria al uso de terapia inmunosupresora como los corticoides, y
quimioterápicos usados contra el cáncer o las enfermedades autoinmunes como el
Lupus eritematosos sistémico.
Actualmente se dispone de una vacuna nonavalente,
es decir que protege contra nueve serotipos de virus y que por ello previene las
enfermedades causadas por el VPH, dentro de las cuales está el Cáncer de cuello
uterino y los diferentes tipos de condilomas como el Gigante del que hicimos
mención. La edad de inicio de dicha vacunación es a los 9 años y también pueden
ser vacunados los varones.