viernes, 24 de septiembre de 2021

El sindrome de Herlyn Werner Wunderlich. Una anécdota.

 


La primera vez que vi a una adolescente con el Síndrome de Wunderlich o  síndrome de Herlyn-Werner-Wunderlich también llamado OHVIRA (Obstructed Hemivagina ipsilateral Renal Anomaly, fue después de haber sido sometida a la amputación del anexo del lado de la obstrucción vaginal, al ser confundido con una tumoración de contenido hemorrágico, cuando el cirujano pensando en una apendicitis complicada la sometió a una laparotomía donde comprobó que el abdomen agudo por el cual ingresó a operar era de tipo ginecológico. Traía un resultado de Anatomía Patológica donde mencionaba el buen estado del apéndice cecal y que aquel tumor hemorrágico correspondía a la trompa de Falopio derecha. La paciente ya presentaba menstruaciones mensuales que se acompañaron de dismenorrea que solo mereció la prescripción de antiinflamatorios y una nueva cita mensual.

No pudo llegar a la siguiente cita, antes regresó a la emergencia con un nuevo dolor intenso en fosa iliaca derecha sin haber cumplido un mes de la intervención anterior. Los cirujanos de guardia pensaron en una complicación de la operación anterior. ¿Un absceso residual? ¿ Un hematoma, sangrado?

Siendo imprescindible la relaparatomía no dudaron en volver a ingresar en búsqueda de una razón de ese dolor recidivante. El hallazgo ahora fue de una tumoración mayor, el aspecto de útero hizo pensar que podría ser un embarazo, que extrañamente no se dejó ver la primera vez y coincidentemente había sangrado vaginal.

Era de noche, ya no estaba de turno, fui llamado por el jefe de la guardia y maneje hasta el hospital sin el tráfico habitual.

-Es una embarazada – me dijo el jefe de Guardia cuando ingresaba por la puerta de emergencia, luego de enterarse que la mamá de la niña estuvo casi por desmayarse al ser informada por el cirujano, que ya entonces había cerrado el abdomen y seguía confundido.

Revisé la historia y descubrí mi consulta de días atrás y el resultado de anatomía patológico tan extraño. Solo había algo por hacer, un examen físico de los genitales externos.

La presencia de un tabique lateralizado abombado hacia el lado derecho, dibujó en mi mente lo que había sospechado luego de introducir todos los datos de los cirujanos y de la historia. Era un útero didelfo con un tabique unilateral que generaba un hematocolpos (atrapamiento de sangre menstrual en la vagina) y hematómetra (lo anterior que también ocupa el útero. Todavía no conocía el nombre propio de la malformación ni las siglas con que se nomina actualmente, eso fue después cuando lo escuchamos de la experiencia de nuestros maestros del extranjero.

Operamos a la paciente resecando el tabique y reconstruyendo una vagina única con 2 úteros libres para su habitual función.

Después de casi 20 años, la exitosa operación de un nuevo caso el día de hoy revive cada experiencia con esta malformación y nos hace sentir que la Ginecología pediátrica es una subespecialidad con nombre propio.

lunes, 30 de agosto de 2021

Condiloma acuminado gigante, un caso raro, pero a tomar en cuenta

 












Los condilomas o verrugas venéreas son lesiones pigmentadas (oscuras) en forma de coliflor que aparecen en la vulva y en las áreas circundantes como el periné, y la zona perianal, pudiendo observarse también en la mucosa vaginal, anal e inclusive crecer por dentro de la vejiga y ser vistas saliendo por el meato urinario.

Estas lesiones son causadas por el Virus del Papiloma Humano, generalmente los del tipo 6 y 11, los cuales son identificados como benignos o de bajo riesgo.

El virus del Papiloma Humano (VPH) es transmitido sexualmente y su prevalencia en la población general es alta, pero en las niñas se asume que podría existir la posibilidad de una Transmisión Vertical, es decir ser adquirida de su propia madre en el momento del embarazo o durante el nacimiento. También se menciona la posibilidad de ser transmitida por madres o cuidadores en los primeros años durante las actividades destinadas a la higiene genital o cambios de pañal, puesto que dichos tipos de virus también suelen causar verrugas vulgares en los dedos y en las manos. Sin embargo, no se debe soslayar la presencia de estas verrugas y dejar de pensar en la posibilidad de abuso sexual ya que se sabe que la modalidad de contacto manual-genital es una variante frecuente en los casos de tocamientos de un abusador contra su víctima.

Mención aparte debe tener el llamado Condiloma Gigante o Tumor de Butshcke Löwenstein que es el mismo condiloma que ha alcanzado grandes dimensiones constituyéndose en una masa compacta que exige una intervención quirúrgica especializada, generalmente asociado a condiciones de inmunodeficiencia primaria o secundaria al uso de terapia inmunosupresora como los corticoides, y quimioterápicos usados contra el cáncer o las enfermedades autoinmunes como el Lupus eritematosos sistémico.

Actualmente se dispone de una vacuna nonavalente, es decir que protege contra nueve serotipos de virus y que por ello previene las enfermedades causadas por el VPH, dentro de las cuales está el Cáncer de cuello uterino y los diferentes tipos de condilomas como el Gigante del que hicimos mención. La edad de inicio de dicha vacunación es a los 9 años y también pueden ser vacunados los varones.

Embarazo adolescente y abuso sexual (II)



Uno de los problemas de salud del Perú, dentro de la Ginecología Pediátrica y de adolescentes es sin duda la alta tasa de Embarazos adolescentes que pese a una serie de propuestas para garantizar su prevención no han sido eficientes en los últimos 20 años. Si bien es cierto que es un problema multifactorial, relacionado con variantes sociales, económicas y sobre todo con el nivel educativo y la escolaridad venida a menos, más aún con la pandemia actual, hay un lugar donde los profesionales de la salud podemos contribuir. Tomando en cuenta que en los grupos de menor edad, el embarazo en un buen porcentaje está relacionado con el abuso sexual es menester que tengamos ginecólogos preparados en el manejo adecuado de la atención de emergencia del abuso sexual y concientizar a la población general que dicho evento es un tema de salud por lo que su primera estación debe ser un centro de salud donde se le debe brindar la anticoncepción de emergencia entre otros recursos y  evitar un embarazo producto de este infame ataque. Los centros de salud deben contar con el levonorgestrel 1,5 mg, que es una dosis única que produce dos efectos importantes para prevenir un embarazo tales son: el espesamiento del moco cervical que impide el ingreso de los espermatozoides y la inhibición de la ovulación.

El embarazo adolescente ha tomado mayor relevancia al ser identificado que la mortalidad materna en este grupo no se ha modificado al mismo ritmo que la mortalidad materna de la población general, lo que se ha relacionado con las edades cada vez más tempranas de la población embarazada, siendo las complicaciones relacionadas con enfermedades intercurrentes como aquellas propias del embarazo como la preclampsia, las causas de estas muertes prematuras y esto hace que tengamos que pensar detenidamente en volver a hablar de la importancia del aborto terapéutico en estas niñas-madres más aún si ha sido causado por una violación, sin descartar aquellos casos de suicidio o parasuicidio con las secuelas conocidas de casos emblemáticos.